Un espacio de juego y expresión corporal que conecta a los niños con sus emociones
Taller Rizoma, un espacio en Comodoro Rivadavia dedicado a las primeras infancias. Allí, los más pequeños concurren para explorar la expresión corporal, el juego y también el vínculo con sus padres.
En las salitas de Rizoma, las cosas pequeñas y los colores abundan, y el lugar les pertenece. Papel, goma Eva, cubos, libros, sillitas y juguetes están todos a disposición, a la espera de que alguien llegue a jugar.
Marianela Escobar es la creadora del Taller Rizoma. Ella es profesora de danzas con especialidad en folklore y tango, pero su interés siempre se ha enfocado en la expresión y el lenguaje del cuerpo, lejos de las estructuras de los pasos y técnicas a seguir.
La docente no solo trabaja en Rizoma, sino que distribuye sus horas en un centro de salud y es profesora de equitación. Su experiencia le demuestra diariamente que los pequeños y también los adolescentes tienen una necesidad de expresión que muchas veces no saben cómo canalizar.
“Cuando las infancias y los adolescentes no pueden o no saben manifestarse, se retraen, se angustian y es ahí donde recurren a veces a los golpes o a la autolesión en los más grandes”, afirmó Marianela.
La docente se encuentra a diario con niñas y niños que no saben cómo gatear o desplazarse más allá de sentarse y mirar una pantalla o un pizarrón. El cuerpo debe pensarse como un todo, en relación con los otros y al contexto; no se lo debe fragmentar.
¿A quién se le ocurrió pensar que el cuerpo no habla? Claro que puede, a través del juego y el vínculo con los demás, y es Rizoma donde las familias concurren para recuperar y conectarse con estas experiencias.
TALLERES PARA LA PRIMERA INFANCIA
El taller para las primeras infancias está dirigido a niños de 1 a 3 años aproximadamente. Son grupos muy reducidos donde, a partir del juego, aprenden a relacionarse, respetar el espacio de los demás y también los límites.
Los pequeños trabajan de a dos y, a través de diferentes metodologías, como el teatro, la poesía y otros juegos, aprenden a “inspirar al cuerpo, hacerlo reír”, ya que este es una vía muy importante de expresión.
En el transcurso de su experiencia, la docente ha podido detectar variadas dificultades, pero la tecnología y el exceso de pantallas son una de las grandes problemáticas en los más pequeños.
“Primero conocemos a los niños, los observamos y luego armamos las clases en función de sus necesidades”, expresó Marianela.
La docente prepara instalaciones lúdicas en los rincones de la sala que recorren como en postas. Utiliza materiales que no sean peligrosos para los niños y, a medida que los recorridos avanzan, los pequeños resuelven obstáculos, eligen las texturas que les gustan y comparten con sus pares.
Escuchar un cuento y entender lo que dice, armar un juego con bloques y desarmarlo para que se convierta en otra cosa, escuchar música y tocar instrumentos, bailar. Entender que los juguetes se pueden compartir con otros y que eso los hace mucho más divertidos. Así, los pequeños habitan las horas en el taller Rizoma.
TALLERES DE CRIANZA VINCULAR
Los talleres de crianza vincular se desarrollan en diferentes momentos del año y participan padres e hijos. Allí se realizan diferentes juegos y actividades, como, por ejemplo, persecución, cosquillas, cambiar pañales, etc.
“He podido observar que a veces los padres están confundidos y dudan, y eso los lleva a alejarse del vínculo con sus hijos. Se pierden los abrazos, los juegos o la simple lectura de un cuento”, señaló la docente.
Recuperar los momentos compartidos, jugar y escucharse es fundamental para fortalecer los lazos familiares.
En Rizoma, las actividades se toman pocas vacaciones, y es por eso que diciembre los espera a los niños con más actividades para disfrutar.
TALLERES PARA DICIEMBRE
A partir del sábado 7 de diciembre y por 4 encuentros, la docente Camila Vilches llevará adelante un taller navideño dirigido a niños de 5 a 7 años. Allí realizarán manualidades en bidimensión y tridimensión para Navidad y Año Nuevo.
La palabra "rizoma" representa la posibilidad de romper con lo sistemático y estructurado, y eso es lo que sucede en este taller: la expresión y el juego son uno de los caminos para que los más pequeños puedan canalizar sus sentimientos y sensaciones a través del cuerpo.
Conocé a taller Rizoma